viernes, agosto 19, 2005

La vida sin vaselina...


La emoción me mata. Danny Succo corre a toda velocidad por el lecho de un canal que bien podría ser el canad del Topo Chico. Conduce el coche blanco con un relámpago amarillo pintado que él y sus camaradas, los temibles T-Birds, reconstruyeron después de una fiesta gay en el taller de la escuela Raydel (no se si así se escribe). Tras una cardiaca competencia, el joven Danny le arrebata el triunfo a ese sujeto del automóvil negro líder de los Scorpions, probablemente el peor fósil de toda la historia de la educación estadounidense. En tanto, una dulce Sandy ataviada en un vestido rosa observa la carrera. Al consumarse el triunfo de su amado, Sandy mira al horizonte para después pedirle a French que la convierta en una prostituta transgénero con tal de agradarle a su bicicleta noviecito.
Sí, es cierto... Todo es patético, hasta Rizzo como joven Nina Myers de 24.
Sin embargo, lo más triste de todo es que son las 11:44 de la noche de un viernes, estoy solo en mi cama y me encuentro viendo esta estupidez por TV Azteca... Carajo. La vida es una mierda...